
Grecia, Alajuela. En el corazón de Grecia, un murmullo comenzó a crecer como semilla en tierra fértil. Era apenas un susurro, un anhelo compartido, pero poco a poco fue tomando forma, como una chispa que encuentra el viento y se convierte en llama. El teatro comunitario nació no solo como escenario, sino como espejo y refugio: un lugar donde las voces dormidas de la gente se despiertan, donde lo cotidiano se viste de poesía, y donde los silencios encuentran palabras que nunca se habían atrevido a pronunciar.
Lo que comenzó en abril de 2024 como un sueño compartido entre los griegos, hoy se ha consolidado en un espacio de expresión y creación colectiva: el Teatro Comunitario 27 de Abril. Bajo el respaldo de la Municipalidad de Grecia, a través de su programa de Agenda Territorial, y de la Universidad Estatal a Distancia (UNED), alrededor de 25 personas dieron vida a un proyecto que busca abrir un escenario local a la voz y al talento de la comunidad.

Para el proceso de conformación los interesados debieron superar filtros que incluían entrevistas personales. De esas entrevistas, solo 25 personas lograron avanzar, convirtiéndose en la base inicial del grupo. Más que una simple selección, fue un ejercicio de compromiso y autenticidad, donde cada participante debía demostrar su disposición para asumir el reto del teatro.
El teatro como voz
Gaudy, actriz del grupo de teatro 27 de abril, comparte que el escenario representa la oportunidad de expresar lo que muchas veces callamos en la vida cotidiana. “Hacer teatro es decir lo que normalmente no me atrevería a decir”, comentó en una de sus intervenciones, resaltando el sentimiento liberador que encontró en la actuación.
Ese espíritu fue el motor detrás de la primera producción del grupo, “Delirios”, una obra que se convirtió en un éxito a nivel cantonal y que, además de entretener, marcó un hito al promover por primera vez el teatro local en Grecia.
Escalando en la formación
El entusiasmo del colectivo no se detuvo ahí. Motivados por mejorar sus destrezas actorales, sus miembros se sumaron al Taller Nacional de Teatro, donde durante siete meses enfrentaron un proceso intensivo de capacitación. El resultado fue la segunda producción teatral: “Cuatro corazones sin freno y marcha atrás”, un montaje que no solo elevó la calidad escénica, sino que reafirmó la identidad del grupo.
Hoy, los integrantes del teatro 27 de Abril, se describe a sí mismo con una sola palabra: pasión. Es el sentimiento que los une y que los impulsa a invitar a otros a lanzarse a perseguir aquello que más les gusta,
El teatro comunitario de Grecia se convierte así en un faro cultural que demuestra cómo el arte, cuando nace desde la comunidad, no solo entretiene: también transforma.


